domingo, 9 de noviembre de 2014

ENRIQUE PONCE Y SEBASTIÁN CASTELLA A HOMBROS POR LA PUERTA GRANDE DE ACHO

El maestro Ponce cuajó una memorable faena al 4º toro, faena que encandiló a la sensible afición de Acho. Cuatro toros de Roberto Puga fueron aplaudidos en el arrastre.

Por: Gonzalo Villanueva y José Hernán Livia (Fotos y texto)

ENRIQUE PONCE Y SEBASTIÁN CASTELLA. Rumbo a la puerta grande de Acho por sus méritos.

  Hubo un ambiente fenomenal en Acho, ya que se presentaba Enrique Ponce y Sebastián Castella, además de Alfonso de Lima.

   Cuatro toros de Roberto Puga fueron aplaudidos en el arrastre, bien por el ganadero.

   La afición afición vivó una gran tarde de toros.

Enrique Ponce, el torero de Lima, porque siempre que se presenta en la capital del Perú sale mentalizado a triunfar, además le puede a todos los toros. Esta vez no fue la excepción en sus 25 años de alternativa. Con su primer toro sólo se lució por verónicas, con la muleta el toro era imposible lucirse porque se colaba descaradamente, simplemente tuvo que abreviar, cierto sector del público no entendió las dificultades del toro. Con su segundo toro, con la muleta estuvo en maestro, brindó a la afición y mirando al cielo a Manzanares padre, lo lidió cerca del tendido 10, varias series de derecha fueron ejecuatada con ese toreo magistral que sólo el maestro lo puede hacer, también los doblonos fueron caros y muy celebradas por la afición, Acho fue un loquerío de emoción, la estocada fue honda y desprendida, el 90% de la afición pide las dos orejas para el matador que los concedió la presidencia,dio al vuelta al ruedo ecuchando de la afición ¡TORERO! … El toro es aplaudido en el arrastre.

Sebastián Castella tuvo un feliz reencontró con la afición limeña. En su primer toro, se lució en el quite por chicuelinas, en la muleta brida a la afición, empieza su trasteo con unos cambiados por la espalda quehacen delirar al respetable, mientras el toro tuvo gas, ejecutó series de derechazos y naturales con mucho temple ante la aprobación de la afición, termina con unos redondos que también calan en el publico, con el acero deja media estocada luiego descabella al primer intento y se gana una merecida oreja que el público celebre y el toro es aplaudido en el arrastre. Con su segundo no hay acople en el capote, a pesar de que el toro es noble y tiene trasmisión el coleta no brinda, con la muleta ejecutó series de derechazos con mucho temple ante la celebración del público, la serie por naturales fueron bien ligadas, así como los redondos ante los ¡oles! … sensibles de la afición, a pesar de que la estocada fue ahonda, algo trasera y desprendida le otorgan una oreja como premio a su entrega, el toro fue aplaudido en el arrastre.

Alfonso de Lima perdió la oreja de su segundo toro por no estar acertado con el descabello. En su primer toro no hay acople en el capote, brinda su faena a Ponce, no pudo lucirse porque el toro tenía poca fuerza y tenía media embestida. En su segundo toro no hubo lucimineto en la capa, el mismo matador le dio un picotazo, quita por navarras, Dennis Castillo deja dos sensacionales pares de banderillas que le obligan a desmonterarse, brinda a sus amistades que están en el tendido 11, con la muleta sólo se lució en algunas series de derecha y en las manoletinas con que termina su trasteo, deja una estocada honda en todo lo alto y descabella al segundo intento, su labor fue premiada con la vuelta al ruedo.

   Al final del festejo, Enrique Ponce y Sebastián Castella salieron en volandas ante la unánime aprobación de la afición que vivió una gran tarde de toro.

   A Roberto Puga acompañado de Juan Manuel Roca Rey se le veía feliz por el buen juego de la mayoría de sus toros.

FICHA DE LA CORRIDA. Lima 9 de noviembre del 2014. Quinto festejo, tercera corrida de la Feria Taurina del Señor de los Milagros. Casi tres cuartos de entrada en los tendidos. Se lidiaron cinco toros de Roberto Puga del 2º al 6º con hechuras de toro, el 6º más chico,fueron nobles, el 2º; 4º; 5º y 6º aplaudidos en el arrastre; el 1º fue de Santa Rosa de Lima justo de presencia; pero tendía a colarse en la muleta.

Enrique Ponce: Silencio y dos orejas.

Sebastián Castella: Oreja y oreja.

Alfonso de Lima: Silencio y vuelta al ruedo.

 DERECHAZO CON MAESTRIÁ. De Enrique Ponce a su segundo toro.


CAMBIADO POR LA ESPALDA. Así empezó su faena de muleta Castella a su primer toro.


 SOMETIENDO POR DERECHA. Alfonso de Lima a su primer ejemplar, toro que no dio facilidades para la lidia.

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