Gustavo Zúñiga luciendo las dos generosas orejas que le dieron en su primer astado.
Después de algunos años en San Miguel de Canta se da un festejo donde se
estoquearon a los astados. Poco se esperaba de la ganadería de la Comunidad de Chaviña, ya que en una anterior
oportunidad en Lima, vimos astados de esta ganadería descastados y con sentido; pero ahora fue diferente, los dos
primeros se dejaron lidiar en la muleta, el cuarto tuvo más movilidad y
nobleza; pero la poca iluminación no permitió verlo en su real dimensión, el
tercero fue muy complicado.
Gustavo
Zúñiga
conoce mucho al ganado nacional y se lució sobre todo con la muleta en su
primer astado, a pesar de que dejó una estocada mal señalada le otorgaron dos
generosas orejas. En su segundo astado poco pudo hacer ya que no sirvió para
lucirse.
A Ángel Jiménez le tocó el
mejor lote, con su primer burel trató de someterlo por ambos pitones y dejó una
estocada casi baja y le otorgaron sorpresivamente dos apéndices. Su último
astado fue el mejor; pero por la poca iluminación, no le pudo sacar provecho
que merecía esta faena, con el descabello se le pasó el tiempo.
Nuestras felicitaciones a los mayordomos de
San Miguel Arcángel, Santos Zevallos y Bertha Alta por el esfuerzo de hacer un
festejo de esta categoría..
Este festejo empezó cerca de las 5 de
la tarde, imposibilitando que el último ejemplar se lidie con poca iluminación
natural.
San Miguel de Canta, 30 de setiembre del 2019. Su coso lució más de tres cuartos de
entrada. Se lidiaron 4 astados de La
Comunidad de Chaviña, Ayacucho, jóvenes, el 1° y el 2° sirvieron en la
muleta, 3° complicado, el 4° embistió con más clase.
Gustavo Zúñiga. Dos orejas y silencio.
Ángel Jiménez. Dos orejas y silencio…
Ángel Jiménez y Gustavo Zúñiga rodeado de algunos subalternos antes del festejo.
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