El diestro cajamarquino conquistó el “Escapulario
de la Virgen de la Candelaria” de la localidad sureña al cortar por partida
doble los trofeos de su primer toro.
EMILIO BARRANTES. Luciendo las dos merecidas orejas a su primer toro de Campobravo. El cajamarquino merece que se le habrán las puertas de muchas plazas del país.
Espinar, pueblo de
tradición taurina, se encuentra en la región de Cusco y celebraba sus fiestas
del 5 de febrero en honor a la Virgen de la Candelaria, donde hicieron el
paseíllo en su plaza “Versalles” llena en ¾ de su aforo el colombiano Cristóbal
Pardo, el hispano Miguel Tendero junto al nacional Emilio Barrantes, para
lidiar un encierro de Campobravo.
El triunfador de la tarde
y merecedor al premio en juego fue Barrantes, fino torero cajamarquino que se
pudo gustar y expresar, así como convencer a la afición sureña que lo veía por
primera vez, cortando dos orejas en su primer ejemplar y siendo aplaudido en su
segundo. Fue paseado en hombros al finalizar el festejo con el Escapulario
ofrecido por los alferados en las manos.
Cristóbal Pardo no pudo redondear una tarde, en la que su animoso
toreo y conexión con el tendido le hizo merecedor a una oreja del primer
ejemplar de la tarde y silencio en el cuarto, mientras el español Miguel Tendero paseó también un trofeo
en el primero de su lote y se retiró en medio de una ovación al emborronar un
notable trasteo con la espada.
Espinar, Cusco. Domingo, 5 de febrero. Plaza
de Toros “Versalles” que lució tres cuartos de entrada de público en sus
tendidos. Se lidiaron 6 astados de Campobravo,
de juego variado.
Cristóbal Pardo (grana y oro): Oreja y
silencio.
Miguel Tendero (grana y oro): Oreja y
ovación.
Emilio Barrantes (blanco y plata): Dos
orejas y palmas.
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